Debieran bastar apenas unas pocas palabras para delimitar el contexto: Mataquito, Planta Licancel, los peces muertos, la parafernalia por lavar la imagen y los torrentes. Sí, el río fluye, pero entre esta turbulencia marrón ya no hay forma de flotar. El paisaje, verde allá en el fondo, aún resiste la amenaza de lo que se viene aguas abajo. Pero ya no hay peces que cuenten esta historia. Los obreros, blindados de plástico amarillo, hacen lo que deben, lo que pueden, lo que alcanza apenas para ganarse el pan en una pega de por si cochina. Todo, todo, todo esto es lo que hay. Lloremos.
Fotografía: Julio Castro
Texto: Pablo Padilla
Para hacer comentarios, pincha el texto verde que dice "comments"
Fotografía: Julio Castro
Texto: Pablo Padilla
Para hacer comentarios, pincha el texto verde que dice "comments"
3 Comments:
la pregunta del millon... me autorizan a usar en mi blog sus textos o imagenes (nunca antes lo habia hecho, lo de solicitar autorizacion), pero la conciencia obliga... en todo caso todo es para aumentar la difusion de temas que son de uso cotidiano y publico y a los que la oficialidad de la prensa ignora.
Un abrazo
http://atacama2006.blogspot.com
hay un lado de chile bien asqueroso y me refiero a todo nivel de cosas
eS POR ESOQUE DEBEMOS TODOS COMENZAR A LIMPIARNOS Y TOMAR CONCIENCIA DE LO COTIDIANO CON QUE A VECES ENSUCIAMOS NUESTRAS RELACIONES Y CONTROLAR NUESTROS LENGUAJES CUANDO SOMOS AIRADOS; A VECES ES BUENO SER AGRESIVO CONTROLADO; PARA DAR UNA SENAL DE LO QUE ES LA AGRESIVIDAD;lo mismo debemos sentir cuando la naturaleza se muestra agredida, ella se muestra abandonada, pero nunca nos agrede, ella nos deja el tiempo de reflexionar sobre lo que le ocurre a ella, y sobre todo cuando el lugar no es accesible a nuestro programa humano y que nosotros lo hemos "contaminado.
Publicar un comentario
<< Home